
- Ogbe She: Análisis profundo y consejos claves
- ¿Qué significa Ogbe She?
- Características del Signo Ogbe She
- Refranes de Ogbe She
- Rituales y Obras Asociadas con Ogbe She
- Generalidades del signo Ogbe She
- Lo que nace en Ogbe She
- Ogbe She en el Amor
- Dice Ifá en Ogbe She
- Recomendaciones del Signo Ogbe She
- Prohibiciones del Signo Ogbe She
- Rezos del Signo Ogbe She
- Patakies del Signo Ogbe She
Ogbe She: Análisis profundo y consejos claves
Ogbe She, también conocido como Ogbe Oshe, es uno de los signos principales del sistema de Ifá, una tradición espiritual yoruba que guía a quienes buscan sabiduría y armonía. Este oddun, asociado con la riqueza, la perseverancia y el poder de la palabra divina. Revela cómo el dinero llegó al mundo, la importancia de la paciencia y los sacrificios para vencer las adversidades.
¿Qué significa Ogbe She?
Ogbe She es un signo de Ifá que encarna la dualidad entre la lucha y la victoria. Su nombre se descompone en «Ogbe», que representa la luz y el comienzo, y «She», vinculado a la acción y la realización. En el cielo, este oddun era conocido como Igbera Orun («Él levantó cabeza por encima de sus enemigos»), un título que refleja su esencia: superar obstáculos para alcanzar la grandeza.
Espiritualmente, Ogbe She está ligado a Orunmila, el orisha de la sabiduría y la adivinación, quien guía a sus hijos hacia la prosperidad. También conecta con Oshún, la madre protectora, y Elegba, el guardián de los caminos. Este signo habla de un destino marcado por la abundancia, pero solo si se respeta el equilibrio y se honra a los orishas mediante sacrificios y obediencia.
Características del Signo Ogbe She
Simbología
- Números: 6 y 16, relacionados con las ofrendas y la corona de Obatalá.
- Colores: Blanco (pureza), amarillo (riqueza de Oshún) y negro (protección).
- Animales: Loro (símbolo de comunicación), chivo (sacrificio a Eshu), gallo (ofrenda a Oggún).
- Elementos: Cadena (custodia y liberación), dinero (prosperidad).
Rasgos de personalidad
Quienes nacen bajo Ogbe She suelen ser personas reservadas, intuitivas y con un don natural para la adivinación. Su voz, fina y baja, porta la autoridad de Orunmila. Sin embargo, pueden ser desconfiados y solitarios debido a las pruebas que enfrentan. Son generosos, pero deben aprender a no maldecir, pues su palabra tiene poder.
Refranes de Ogbe She
- «No hay necesidad de discutir cuando hay una forma de demostrar» : La verdad se muestra con hechos, no con palabras vacías.
- «El hombre moral, su espíritu no muere» : La integridad trasciende la vida física.
- «La carreta se va dentro de los bueyes» : El orden y la dirección son clave para avanzar.
- «El que no tiene virtud se desprecia más que el que tiene un vacío» : La falta de valores pesa más que cualquier carencia material.
Rituales y Obras Asociadas con Ogbe She
Eboses (Ofrendas)
- Para la prosperidad: 6 torrejas a Orunmila y un pescado fresco (eyá tuto) a Oggún.
- Para vencer enemigos: Un chivo a Eshu y un gallo a Oggún, con coco para rogar la cabeza.
- Para la salud: Corona con 16 plumas de loro a Obatalá y baño con hierbas de Oshún.
Hierbas Relacionadas
- Pino Frailecillo: Protección espiritual.
- Platanillo de Cuba: Limpieza energética.
- Artemisa: Purificación.
- Mastuerzo: Fuerza interior.
Generalidades del signo Ogbe She
En Iré
Cuando Ogbe she viene en bendición ( iré arikú o iré ashegun ota ), promete riqueza, herencias y protección de un Egun (espíritu ancestral). Habla de viajes fructíferos y victorias sobre enemigos. Ejemplo: una persona destinada a recibir «gran cantidad de dinero de negocio o campo» si honra a Orunmila y Oshún.
En Osogbo
En adversidad ( osobo ikú, arón, ofo, eyo, ogu ), advierte sobre trampas, envidias y enfermedades (vista, estómago, bronquios). Puede señalar traiciones familiares o riesgos de prisión si no se hacen sacrificios. Por ejemplo, «el enemigo más poderoso está en el seno de su propia familia» exige cautela y eboses urgentes.
Lo que nace en Ogbe She
- El saludo y la imploración a Olorun: Un acto sagrado de reconocimiento al creador supremo, un puente entre la tierra y el cielo.
- El secreto de la prenda de Oboniboshe: Un objeto ritual, un malaguidi de poder, envuelto en cadenas y misterio, que guarda la esencia de la protección.
- El revólver: Símbolo de fuerza y defensa, nacido para equilibrar el poder en el mundo.
- Que las obras que le marquen a Shangó para resolver se hagan a las cuatro de la mañana: Un mandato divino que alinea el tiempo con la voluntad del orisha del trueno.
- El espía: La figura que observa en silencio, un guardián de secretos que protege y revela.
- Que los omo Oshún no le ponen las manos en la cabeza a los omo Shangó: Una regla sagrada que preserva la armonía entre los hijos de estos orishas.
- El tatuaje: Una marca en la piel, un pacto de identidad y resistencia nacido en este oddun.
- El orisha Adamu, origen de Aguema: Una deidad ancestral que trajo consigo la semilla de la fortaleza y el equilibrio.
- Aquí fue donde Oba perdió la oreja: Un momento de sacrificio y lección, donde la entrega marcó un cambio irreversible.
- Aquí habla Oshún Ibu Aparo: La voz de Oshún, reina de la risa y la falsedad, que enseña a escuchar más allá de lo evidente.
- La facultad de la premonición en los seres humanos. La profecía: El don de ver el futuro, un regalo divino para guiar el camino.
- Aquí fue donde Elegba hizo pacto y recibió enseñanzas de Aña: El encuentro entre el mensajero y el tambor sagrado, sellando un vínculo eterno.
- En este Ifá Shangó le devolvió la alegría a Olofin: Un acto de redención que restauró la luz en el corazón del rey celestial.
- El cargo de otorrinolaringólogo: Una metáfora de sanación, ligada a la claridad de la voz y la escucha.
- La enfermedad llamada síndrome de Ménière: Una prueba física que llama a la atención espiritual y al cuidado del cuerpo.
Ogbe She en el Amor
Las personas marcadas por Ogbe She aman con profundidad, pero su reserva y desconfianza inicial pueden dificultar la entrega. Buscan relaciones que les brinden estabilidad y respeto mutuo, reflejando su necesidad de equilibrio. Son protectores y generosos con sus parejas, pero exigen lealtad absoluta, pues la traición les hiere profundamente. Oshún, su madre espiritual, les enseña a fluir en el amor como agua dulce, mientras que Elegba les recuerda mantener los ojos abiertos ante las intenciones ocultas.
Dice Ifá en Ogbe She
Ogbe She susurra verdades profundas, un canto profético que resuena en el alma de quienes lo escuchan. Este signo de Ifá, como un espejo del destino, revela abundancia y advertencias de sombras. A través de sus palabras, Orunmila guía a sus hijos, mostrándoles un camino donde la fe, la acción y la cautela se entrelazan. Presta atención a lo que dice Ifá en Ogbe She, porque en cada mensaje hay un reflejo de tu vida, un llamado a alinear tu espíritu con la voluntad divina.
Ogbe She en lo Personal
Ifá dice en Ogbe She que eres un alma marcada por la fortaleza, pero también por la dureza de tu cabeza. «Usted tiene la cabeza dura», advierte Orunmila, invitándote a ceder ante la sabiduría y no aferrarte a tu orgullo. Este signo te pide respeto a tus mayores, que nunca quieras ser más que ellos, pues en la humildad reside tu crecimiento. Si últimamente lloraste por una mujer o te entristeces sin razón, no tomes las cosas a pecho; Esa tristeza podría costarte caro. Haz rogación sin demora, con eyá tuto para tu lerí, y lleva todo al escusado con una cadena, liberando así las cargas que te atan.
Ogbe She en la Economía
En Ogbe She, Ifá anuncia que «le viene un dinero por el camino», una bendición que ya está en marcha. Sin embargo, antes debes tomar lo que tienes guardado y hacer rogación para vencer al enemigo que acecha tu prosperidad. Este signo promete una herencia o «mucho dinero, como un negocio de campo», pero exige que pagues tus deudas con Oshún y no ofrezcas lo que no puedes cumplir. Después de la rogación, el trabajo abundará, tanto que querrás mudarte a una casa más grande. No trabajes de noche, pues eso retrasa tu suerte; Confía en la luz del día para que Ogbe She florezca en tu economía.
Ogbe She en la Salud
Ogbe She trae advertencias claras sobre tu cuerpo. «Usted siente un dolor en una pierna», dice Ifá, y te pide cuidarte de la vejiga y evitar el agua con azúcar, que podría agravar tu estado. Este oddun señala riesgos en la salud si no actúas: la tristeza puede convertirse en un veneno mortal, y los ojos envidiosos de otros pueden dañarte. No tiñas tu pelo ni descuides tu cabeza; haz rogación urgente para quitarte esos «ojos malos» que te atrasan. Ifá insiste en que, con sacrificio, pasarás de lo malo a lo bueno rápidamente, sanando cuerpo y espíritu.
Ogbe She en las relaciones
Las relaciones bajo Ogbe She están teñidas de intensidad y cautela. «Usted es muy rencorosa», revela Ifá, porque no descansas hasta vengarte de quien te hiere. Este signo te pide soltar esa carga y no jugar con Oshún, a quien debes honrar con lo que le prometiste. Cuidado con las trampas: «Lo van a convidar a una comida, no vaya», porque en esa casa pondrán dos puestos para enredarte. Alguien en tu entorno, con solo mirarte, te impide avanzar; haz rogación para liberarte. Si haces un favor, te temerán, pero no dejes que el miedo de otros te detenga.
Ogbe She y las advertencias
Ifá en Ogbe Ella es un guardián vigilante. «Tenga cuidado que le quieren hacer una mala cosa», advierte, un daño por envidia o venganza. No vayas a reuniones donde puedas salpicarte tinta o pintura, y mantén llena cualquier jaula vacía en tu casa con papeles para evitar energías estancadas. Un sueño malo que olvidaste, quizás de comida o un convite, es una señal; no lo ignores. «Tenga cuidado con la justicia no vaya preso», dice Orunmila, y te urge a mudarte de donde vives para que la suerte te alcance. Antes de un viaje necesario, haz rogación para proteger tu camino.
Recomendaciones del Signo Ogbe She
- Cuida tu vista: Usa gafas si es necesario y haz ebbós para protegerla.
- Vive con personas de color definidas: Rodéate de quienes muestran claridad en sus intenciones.
- Usa un collar de banderas: Símbolo de protección y conexión con los orishas.
- Honra a Elegba: Ofrécele 5 instrumentos musicales para abrir caminos.
- Sé paciente: La prisa destruye la bendición que te espera.
Prohibiciones del Signo Ogbe She
- No tomes agua con azúcar: Evita lo que dulcifica falsamente.
- No trabajes de noche: Preserva tu energía espiritual.
- No te bañes en el río: Olokun puede reclamarte.
- No prometes lo que no cumplirás: La palabra rota atrae osogbo.
- No tiñas tu pelo: Mantén tu esencia natural.
Rezos del Signo Ogbe She
Rezo en yoruba: «Ogbe She kantón obayé dewá kodidé saraundere olokukere ololodiye iyá lodé okeré yi moro enidesun efideremo otolarefa eyi boyó nila oddun ayibagadara ñawasi, ñawasi ikowoshe iyá mi washe shiya mi mori yeyeo ashiyami mori yeyeo».
Traducción aproximada: «Ogbe She, el que canta en el reino de la vida, trae claridad y renueva el mundo con plumas brillantes. El gallo sagrado y la gallina cantan al amanecer, madre del bosque, que con tus manos me lavas y me das fuerza, protégeme con tu poder eterno, madre venerable, cúbreme con tu sombra divina.»
Patakies del Signo Ogbe She

Nació el Tatuaje
El Regalo de Olokun y el Corazón de Orunmila
En los días antiguos, cuando el cielo y el mar aún disputaban su dominio, ocurrió una guerra entre Oduduwa, el rey de la tierra, y Olokun, el soberano de las aguas profundas. Tras un enfrentamiento que estremeció los cimientos del mundo, Olokun, en un gesto de paz, ofreció a Oduduwa una alegría viva: Bromu, una mujer de belleza deslumbrante, cuya risa era como el canto de un río y cuyos ojos guardaban los secretos del océano. Oduduwa la acogió, y juntos construyeron un hogar donde nacieron hijos que llevaron la sangre de los orishas, un linaje bendecido por la creación. Pero el corazón humano es un misterio, y en las sombras de este destino, Orunmila, el sabio de Ifá, contemplaba a Bromu con un amor que ardía como brasas ocultas. Día tras día, su deseo crecía, hasta que la tentación lo llevó a cruzar el umbral prohibido y vivir con ella en secreto, desafiando el orden establecido por Oduduwa.
El Temor y la Guía de Ogbe She
El amor clandestino trajo consigo un peso: el temor de Orunmila a ser descubierto por Oduduwa, cuyo poder era tan vasto como la tierra misma. En su alma resonaba la inquietud, y sus noches se llenaban de visiones inquietantes. Decidió entonces consultar a Ifá, y en el osode, apareció el signo Ogbe She. El signo habló claro: debía hacer un ebbó con akukó, adié, eyele funfun, osun, iyefá y carbón, una ofrenda para apaciguar a los orishas y proteger su camino. Orunmila, con manos temblorosas pero llenas de fe, cumplió el mandato. Luego, guiado por la voz de Ifá, tomó un cuchillo sagrado y se hizo tres incisiones en la piel, frotando en cada una un iyé distinto: polvos de poder que transformaban su esencia. Ogbe She le prometió que, con este acto, podría seguir junto a Bromu sin temor, pues la protección divina lo cubriría como un manto invisible.
La Danza de Eshu y el Nacimiento del Tatuaje
Una mañana, mientras el sol despuntaba, Oduduwa decidió visitar a Bromu en su alcoba, movido por un presentimiento. Orunmila y ella dormían, ajenos al peligro que se acercaba. Pero Eshu, el guardián de los caminos, vigilaba. Al ver que Orunmila había honrado el ebbó de Ogbe She, tejió un engaño con hilos de magia. Cuando Oduduwa entró, no vio al sabio de Ifá al lado de su amada, sino la figura imponente de un leopardo, con ojos feroces y garras afiladas. El rey, sobrecogido por el miedo, huyó despavorido, su corazón latiendo al ritmo de un tambor de guerra. Orunmila despertó, comprendió el milagro y supo que las marcas en su cuerpo —los tatuajes— lo habían salvado. Eran más que heridas; eran un pacto con lo divino, un escudo nacido en Ogbe She que lo ocultó de los ojos vengativos.
La Alabanza a la Verdad de Ifá
Sano y salvo en su hogar, Orunmila alzó la voz al cielo, alabando a Ifá como la verdad encarnada. Las incisiones en su piel se convirtieron en el primer tatuaje, un símbolo eterno de protección y astucia. Desde entonces, los hijos de Ogbe She saben que las marcas que llevamos no son solo adornos, sino promesas grabadas en la carne, recordatorios de que la fe en los orishas puede transformar el peligro en salvación.
Enseñanza: Confía en la guía de Ifá y cumple tus eboses, pues en la obediencia hallarás protección ante las tormentas que amenazan tu destino.

2. Odide el Bailador de Mucha Fama (La Pluma de Loro)
El Danzante que Cautivó el Cielo
En un tiempo donde la tierra vibraba al compás de los tambores, vivía Odide, un ave de pasos ágiles y espíritu indomable. Su fama como bailador era tal que ningún mortal podía igualarlo, y su danza era un espectáculo que incluso los ojos de Olodumare, el creador supremo, seguían con deleite. Cada giro, cada salto, era una ofrenda viva, un canto de alegría tejido con movimientos que parecían desafiar el viento. Odide no bailaba solo para los hombres; su arte era un puente hacia lo divino, una oración sin palabras que resonaba en los cielos. Y así, su nombre se convirtió en sinónimo de gracia y poder, un eco que los pájaros llevaban en sus alas.
La Fiesta Celestial y la Trampa de la Envidia
Llegó el día sagrado de la resurrección, un domingo bendito que Odide celebraba como su propio santo. Con el corazón abierto, invita a todos los santos ya las parejas de pájaros a una gran fiesta, un banquete de danza y comida bajo la mirada de Olodumare. Los invitados llegaron temprano, sus plumas brillando bajo el sol, y el creador aguardaba en su trono, ansioso por ver a Odide. Pero el bailador se retrasó. Cuando finalmente apareció, sus pasos lo llevaron al pie del trono celestial, donde su danza estalló como un río desbordado. Olodumare, con voz profunda, le preguntó: «¿Por qué tardaste tanto, hijo de la tierra?» Odide, con humildad, mostró sus patas blancas, ahora manchadas con aceite rojo, cenizas y polvo oscuro. «Mis enemigos me ensuciaron», confesó, «querían que mi luz no brillara en tu fiesta».
La Salvación de Ogbe She
El creador frunció el ceño y preguntó: «¿Eso es todo lo que te aflige?» Odide negó con la cabeza. «No, señor del cielo. También echaron polvos malignos en mis pies para que no pudiera bailar.» Pero entonces su voz se alzó con esperanza: «Fui a la casa de Orunmila, y él me vio con Ogbe She. Me marcó un ebbó con palomas, un bastón, un carnero, plumas y semillas doradas. Hice la rogación, y aquí estoy, venciendo a quienes me envidian.» En ese momento, la tierra tembló con la presencia de Eshu, testigo del sacrificio. Olodumare, conmovido, proclamó: «Mientras el mundo sea mundo, donde se honre a los orishas y falte tu pluma, no lo aceptaré como completo. Tu danza y tu fe han elevado lo que eres». Así, la pluma de Odide, el loro, se convirtió en un símbolo eterno.
La Enseñanza de la Pluma
Desde aquel día, la pluma del loro se alzó como un emblema de Ogbe She, un recordatorio de que la envidia puede manchar, pero no apagar, la luz de quien confía en Ifá. Odide danzó sobre las sombras de sus enemigos, y su victoria fue sellada por el cielo. Este patakí nos enseña que los obstáculos, aunque oscuros, son solo pruebas que el sacrificio y la fe transforman en bendiciones.
Enseñanza: La envidia de otros no detendrá tu destino si honras a los orishas con tus ofrendas y tu esfuerzo.

Shangó le Devolvió la Alegría a Olofin
La Tristeza de Olofin y el Regreso de Shangó
En una tierra antigua, donde el cielo rugía con los ecos del tambor, Shangó, el comerciante de fuego y justicia, regresó a su hogar tras largos viajes. Al llegar, encontró a Olofin, el rey celestial, sumido en una profunda tristeza. Encerrado en su gran bosque, un reino de árboles altos y sombras densas, Olofin había perdido su voz y su risa. Ningún orisha, ningún canto, lograba sacarlo de su silencio. Shangó, con ojos brillantes como relámpagos, observó la escena y sintió un llamado en su espíritu. Frente a los demás orishas, proclamó con audacia: «Yo tengo el medio para devolverle la alegría». De su bolsa sagrada extrajo un paquete envuelto en telas de cuatro colores, y al abrirlo, un loro gris de cola roja emergió, graznando con fuerza: «De todos los hijos, yo soy el que ve tu corona, Olofin».
El Loro que Rompió el Silencio
El sonido del loro cortó el aire como un trueno suave, y los ojos de Olofin se iluminaron. «¡Pero si habla!» exclamó, y una risa brotó de su garganta por primera vez en mucho tiempo. Tomó al loro en sus brazos y lo colocado sobre su cabeza, donde el ave descansó como un guardián alado. La felicidad volvió al rey celestial, y su corte volvió a vibrar con vida. Sin embargo, la dicha de Olofin despertó envidia entre los orishas. La confianza que ahora depositaba en Shangó, el portador del loro, en celos oscuros en sus corazones. En secreto, tramaron una traición: encapucharon al loro y lo llevaron al centro de la tierra, un lugar de sombras y olvido. Cuando Olofin notó su ausencia, su risa se apagó, y el silencio volvió a envolverlo como una niebla espesa.
La Búsqueda de Shangó y la Luz de Ogbe She
Shangó, al ver la tristeza renovada de Olofin, juró encontrar al loro perdido. Tras días de búsqueda, lo halló famélico y encapuchado, sus plumas grises opacas por el abandono. «¿Quién te hizo esto?» preguntó Shangó, su voz resonando como un tambor de guerra. El loro, con un graznido débil, respondió: «No sé, todos son traidores». Sin perder tiempo, Shangó voló a la casa de Orunmila, el sabio de Ifá. Allí, en el osode, Ogbe She se reveló como un faro de esperanza. Orunmila le dio a Shangó un nuevo loro gris, al que sopló su ashé, un aliento de poder divino. Shangó lo llevó a Olofin, y al escuchar su voz, el rey sonriendo nuevamente, su alegría restaurada por el don de Ogbe She.
El Decreto de las Plumas Sagradas
Olofin, lleno de gratitud, convocó a los orishas y habló con autoridad: «Para que todos respeten al loro, desde hoy sus plumas adornarán vuestras coronas». Así, la pluma gris-roja del loro se convirtió en un símbolo eterno, bendecida por Eshu como testigo. Este patakí de Ogbe She nos enseña que la fe y la acción pueden sanar incluso los corazones más apagados.
Enseñanza: La lealtad y el sacrificio traen luz donde reina la sombra, y lo sagrado prevalece sobre la traición.
Compártelo en tus redes sociales